La caída del ‘Último emperador’. Fedor Emelianenko, considerado por muchos como el mejor luchador en la historia de la MMA, fue derrotado anoche por Antonio Silva en el Strikeforce GrandPrix. El ruso sufrió una terrible herida en el ojo derecho y el réferi no lo dejó salir al tercer asalto del combate.
El excampeón del mítico Pride FC volvió a la jaula por su revancha tras perder sorpresivamente contra Fabricio Werdum. No obstante, ‘Pezao’ acabó con sus sueños. “Sí, tal vez sea la última vez. Tal vez es la hora. Gracias por todo. Tuve una larga y hermosa vida en el deporte”, dijo el ruso tras el combate.
El primer asalto de la contienda fue bastante parejo. Fedor mostró su potencia en los intercambios de golpes y evitó los derribes del gigante brasileño. Incluso pudo encajar una guillotina y tuvo a Silva con la espalda contra la lona en dos ocasiones. ‘Pie grande’ escapó de una kimura y no dejó que el Emelianenko le pasara la guardia.
‘Pezao’ logró un takedown al inicio del segundo asalto y ahí empezó el calvario del ‘Último emperador’. El brasileño castigó con sus enormes puños a Fedor y –aprovechando los 15 kilos de peso a su favor– no lo dejó escapar. Silva estuvo a punto de finalizar al ruso con una palanca de rodilla al final del round.
Un magullado Fedor fue a su esquina con el ojo derecho muy lastimado y el médico le impidió continuar el combate. Silva se emocionó por la victoria más importante de su carrera como luchador y rompió en llanto. Un sector del público enmudeció presintiendo que el final se acercaba.
“Algo pasó al principio y tal vez no vuelva modificarlo. Tal vez sea hora de irse. (…) Muchas gracias por su amor, por su cálida recepción, por su apoyo. Gracias a Dios por todo”, dijo el ‘Último emperador’. A su turno, Silva destacó que le ha mostrado al mundo entero su capacidad con la victoria.
El excampeón del mítico Pride FC volvió a la jaula por su revancha tras perder sorpresivamente contra Fabricio Werdum. No obstante, ‘Pezao’ acabó con sus sueños. “Sí, tal vez sea la última vez. Tal vez es la hora. Gracias por todo. Tuve una larga y hermosa vida en el deporte”, dijo el ruso tras el combate.
El primer asalto de la contienda fue bastante parejo. Fedor mostró su potencia en los intercambios de golpes y evitó los derribes del gigante brasileño. Incluso pudo encajar una guillotina y tuvo a Silva con la espalda contra la lona en dos ocasiones. ‘Pie grande’ escapó de una kimura y no dejó que el Emelianenko le pasara la guardia.
‘Pezao’ logró un takedown al inicio del segundo asalto y ahí empezó el calvario del ‘Último emperador’. El brasileño castigó con sus enormes puños a Fedor y –aprovechando los 15 kilos de peso a su favor– no lo dejó escapar. Silva estuvo a punto de finalizar al ruso con una palanca de rodilla al final del round.
Un magullado Fedor fue a su esquina con el ojo derecho muy lastimado y el médico le impidió continuar el combate. Silva se emocionó por la victoria más importante de su carrera como luchador y rompió en llanto. Un sector del público enmudeció presintiendo que el final se acercaba.
“Algo pasó al principio y tal vez no vuelva modificarlo. Tal vez sea hora de irse. (…) Muchas gracias por su amor, por su cálida recepción, por su apoyo. Gracias a Dios por todo”, dijo el ‘Último emperador’. A su turno, Silva destacó que le ha mostrado al mundo entero su capacidad con la victoria.
