Friday, December 3, 2010

Santos tomó la ventaja en la ida de la final al derrotar 3-2 a Monterrey

Con un autogol de Duilio Davino a cuatro minutos de la conclusión, Santos Laguna se enfiló a una ventaja 3-2 sobre Monterrey en el estadio Corona TSM en el capítulo de "ida" de la final del Torneo Apertura 2010.

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El Match Center del Santos vs. Monterrey

Con la gran marca de la zaga regia sobre los veloces atacantes verdiblancos, Jorge Iván Estrada fue la figura de “Guerreros” al marcar el primer tanto a los 23 minutos y poner el servicio para que Carlos Darwin Quintero consiguiera el segundo a los 42, a la vez que Duilio Davino, con un autogol en el 86, dio al local el triunfo.

El chileno Humberto "Chupete" Suazo tuvo una clara y la concretó en el minuto 38, mientras el argentino Neri Cardozo dio la segunda igualada al 55 de tiempo corrido.

Será el próximo domingo a las 18:00 horas en el estadio Tecnológico cuando se efectúe el choque de "vuelta" de esta final, donde los santistas requieren de ganar o de un empate para coronarse, mientras los regios necesitan un triunfo por dos goles para quedarse con el título.

Monterrey supo frenar a los veloces atacantes del cuadro local: a Quintero, quien logró el segundo tanto de los albiverdes, pero principalmente al ecuatoriano Christian Benítez, así como al volante pampero Daniel Ludueña, para disminuir el peligro sobre su meta.

A la par de ello, tuvo en el sacrificio y participación de Aldo de Nigris y la peligrosidad del "Chupete" Suazo una mancuerna que mantuvo ocupada y nerviosa a la zaga del conjunto de la comarca, esto como respuesta para nivelar el encuentro.

Rafael Figueroa y Francisco Torres fueron elegidos por el técnico argentino Rubén Omar Romano para sustituir al panameño Felipe Baloy y Juan Pablo Rodríguez en la formación titular de Santos Laguna. Además regresó a la titularidad Jorge Iván Estrada.

La primera mitad fue de alternativas, porque ambos equipos generaron varios arribos a las áreas enemigas, pero sin poder concretar por las intervenciones de los guardametas, aunque fue el veterano Oswaldo Sánchez el más exigido toda la noche.

Aunque el campeón goleador Christian Benítez no anotó, a los 23 minutos hizo que tres regios fueran sobre él y eso abrió el espacio para que a pase suyo apareciera por sorpresa un siempre correlón “Guty” Estrada, quien recibió solo por la derecha y en el área sacó tiro al ángulo izquierdo a la salida de Jonathan Orozco para el 1-0.

Rayados no se desarticuló y mantuvo su orden para evitar otro descuido similar, a la par que De Nigris mantenía ocupados a los nerviosos defensas de la comarca. En un balón que éste recibió en la media luna, habilitó de taconcito al chileno Humberto Suazo, quien llegó sin marca de frente para batir a Sánchez abajo al centro al 38.

Casi de inmediato llegó otra escapada de "Guty" por el costado derecho, metió un balón al área y Quintero frente al arco conectó sólido con la frente hacia la derecha para que Orozco no alcanzara pese a su estatura para devolverle a los de casa la delantera frente a su afición, al 42.

Tras una primera mitad de un ritmo vertiginoso y de varios arribos a las áreas, en el segundo lapso bajó la intensidad del juego, aunque no dejó de haber aproximaciones y goles.

El nuevo empate se registró a los 55 minutos, en un balón que perdió el central uruguayo Jonathan Lacerda en plena salida. Aldo de Nigris enfiló al área, Sánchez salió para intentar robarle el esférico pero no lo consiguió y quedó libre para que Neri Cardozo llegara para tirar a marco vacío.

Benítez buscó adelantar otra vez a Guerreros en el 62, pero ya cuando iba a fusilar a Orozco casi en el área de meta llegó para barrer y tapar su intento Duilio Davino, mientras a los 64 Oswaldo Sánchez, con manotazo a la derecha salvó su arco de un golazo de "Chupete", quien había empalmado de zurda un balón de volea dentro del área.

Hacia el final del juego ambos estrategas hicieron sus movimientos en la cancha en busca de ganar el encuentro con formas diferentes, y ya cuando el reloj expiraba llegó el tanto del triunfo santista.

José María Cárdenas, uno de los relevos utilizados por el argentino Rubén Omar Romano, desbordó por la izquierda y mandó servicio que fue desviado por Duilio Davino, con la mala fortuna de que impulsó el balón a su propia meta, aunque de no haberlo hecho detrás suyo llegaba Benítez sin marca para empujarlo.

Marco Antonio Rodríguez tuvo una buena actuación como juez central.