Y eso que Manuel Lapuente quiere que pese el Estadio Azteca. El América volvió a hacer el ridículo en casa y el tema ya puso al técnico americanista en una situación prácticamente insostenible con dos derrotas como local y únicamente un punto en el comienzo del campeonato. Héctor Mancilla apareció en la última jugada del encuentro para darle la victoria a Tigres 2-1 y ponerle el pie al estratega de las Águilas, a quien se le viene la noche encima tras un desastroso inicio del Clausura 2011.
Para el equipo de Nuevo León fue un gran resultado porque mantuvo su calidad de invicto en la campaña y trepó hasta el tercer lugar general con siete unidades, mismas que lo tienen en el primer puesto del Grupo 1.
La escuadra azulcrema está formalmente en crisis y si no hay una sacudida pronto se le puede ir la Liga rápidamente, y todavía falta que empiece su actividad en la Copa Santander Libertadores.
El mismo Lapuente mencionó que el objetivo para este torneo era estar entre las primeras tres posiciones de la clasificación, y a lo mejor si le da vuelta a la tabla sí ve al América ahí, pues está en el sitio 16 y último del Grupo 2, con un punto, que por cierto rescató de milagro en la segunda jornada.
EL PARTIDO
Manuel Lapuente siempre tiene algo para sorprender, ya sea una modificación en la alineación titular o bien un movimiento sobre la marcha. Ahora el toque del entrenador americanista vino con la inclusión de Diego Cervantes en el cuadro inicial, un defensa central que no jugaba en Primera División desde el 1 de mayo del 2010.
Manolo había utilizado al joven Patricio Treviño en la zaga en las primeras dos fechas del campeonato, y hoy que no pudo contar con el lesionado Juan Carlos Valenzuela, echó mano de Cervantes, quien en el último año sólo registró 140 minutos de juego en el Máximo Circuito, pues en el Apertura 2010 fue figura, pero del América Sub-20.
En la primera jugada que tuvo Tigres para anotar no perdonó. Lucas Lobos definió con pierna derecha dentro del área en un gran servicio de Alberto Acosta, al minuto 36, en una jugada donde le ganaron la espalda a Cervantes.
Para entonces el portero del conjunto de Nuevo León, Enrique Palos, ya había salvado al visitante cuando Daniel
Montenegro quedó solo para definir tras un buen desborde de Nicolás Olivera.
Y más allá de lo sorpresivo que resultó el hecho de que apareciera Cervantes en el cuadro azulcrema, no se notó ningún avance ni mucho menos en el funcionamiento colectivo. Todo sigue basándose en un chispazo de alguien en ataque. En esta oportunidad fue Vicente Matías Vuoso el que metió al juego a las Águilas con una gran jugada individual por la izquierda para darle medio gol al "Rolfi" Daniel Montenegro, quien sólo mandó el balón al fondo de las redes, al 51’.
En cambio los Tigres, con un planteamiento bien trabajado y una sólida base táctica, tuvieron el control del encuentro prácticamente de principio a fin, con excepción de los primeros 10 minutos del segundo tiempo cuando el América apretó más por la urgencia de empatar que por un buen desempeño, y fue cuando cayó el tanto de la igualada.
Después no pasó gran cosa, la escuadra regiomontana se dedicó a aguantar en su territorio y buscando un contragolpe que le diera el triunfo, y el cuadro de Coapa continuó con su inoperancia a la ofensiva, y el asunto terminó con un tanto de último minuto a cargo de Héctor Mancilla en un desborde por izquierda de Damián Álvarez, sobre Cervantes, para humillar al América al 92’.
EL ARBITRAJE
Sin problemas para el silbante Ricardo Arellano, quien tuvo un duelo bastante accesible para desarrollar un buen trabajo junto con sus asistentes, y en cuestión de tarjetas aplicó bien las amonestaciones, con tres cartones para Tigres.
